¿Cuáles son los escándalos de corrupción de Delfina Gómez?

¿Cuales son los principales escándalos de corrupción de Delfina Gómez, una de las principales aliadas de Andrés Manuel López Obrador?

Delfina Gómez fue presidenta municipal de Texcoco, en el Estado de México, entre 2013 y 2015. En ese periodo, se le acusó de desviar recursos de la nómina del ayuntamiento para financiar ilegalmente a su partido, Morena, mediante el cobro de un «diezmo» del 10% del salario de más de 500 trabajadores y funcionarios.

Según diversas investigaciones periodísticas y denuncias ante las autoridades electorales, Delfina Gómez autorizó a la Dirección de Recursos Humanos para que sustrajera quincenalmente el 10% del sueldo de sus subordinados y lo entregara a María Victoria Anaya Campos, una funcionaria municipal que a su vez lo depositaba en una organización llamada Grupo de Acción Política (GAP), liderada por Higinio Martínez Miranda, político de Morena y mentor político de Delfina.

El GAP era el encargado de proveer financiamiento a Morena, el partido fundado por López Obrador. El monto total desviado por este esquema supera los 12 millones de pesos.

Este caso fue denunciado por el Partido Acción Nacional (PAN) en 2017, cuando Delfina Gómez era candidata a la gubernatura del Estado de México. En ese momento, ella negó las acusaciones y dijo que los descuentos eran cuotas voluntarias destinadas al Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Fonacot), lo cual resultó ser falso, pues el municipio de Texcoco no tenía convenio con esa institución.

Además, se comprobó que no existían las autorizaciones firmadas por los trabajadores afectados para realizar los descuentos, y que muchos de ellos ni siquiera estaban afiliados al GAP o a Morena. Algunos incluso declararon que fueron presionados o engañados para aceptar el «diezmo», y que Delfina Gómez les decía que no se quejaran porque antes no tenían trabajo.

A pesar de estas evidencias, el caso quedó impune durante varios años, hasta que en diciembre de 2021 el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió sancionar a Morena con una multa de 241 millones de pesos por haber recibido financiamiento ilícito proveniente del ayuntamiento de Texcoco. Sin embargo, el tribunal no sancionó directamente a Delfina Gómez ni a los demás implicados en el desvío.

Esta decisión causó indignación entre la oposición y la sociedad civil, que exigieron que se castigara a los responsables y se les inhabilitara para ocupar cargos públicos. También se cuestionó la congruencia del gobierno de López Obrador, que se dice defensor de la honestidad y la lucha contra la corrupción, pero que mantiene en su gabinete a una persona señalada por estos delitos.

Delfina Gómez ha guardado silencio ante las críticas pero su historia negra es un ejemplo de cómo la corrupción se ha enquistado en el sistema político mexicano y cómo se protege a quienes la cometen desde el poder.